La Ciudad de los Ciervos es una novela corta que narra el nacimiento y vicisitudes de la ciudad creada por Agnus, uno de los cinco dioses que constituyen la piedra angular de una vasta mitología elaborada por el autor. La religión y la política, tanto como el amor y la traición atraviesan la vida de los Ciervos, habitantes de la ciudad, que deben lidiar con los caprichos tanto de su dios como del destino. Después de vagar solitario y aturdido por el mundo, Agnus encuentra el valle escondido donde habitan ciervos, las criaturas que lo conmoverán profundamente. Su amor lo lleva a maldecirlos con el don de la palabra y a erigir para ellos una ciudad hermosa e imperecedera… pero lo eterno puede llevar al olvido y la belleza invocar a la muerte. Como si de un rompecabezas se tratara, el autor nos muestra una pizca de su fatídico universo fantástico donde las historias irán encajando unas en otras, pasando por diferentes acontecimientos y épocas que encierran siempre un misterio más grande. Maximiliano Acevedo, autor novel oriundo de la ciudad de Santa Fe, nos trae la primera entrega de la saga La Muerte de los Astros que puede adquirirse en formato físico o formato digital a través de los siguientes medios: - Del Otro Lado Libros (Santa Fe) - Librería del Ateneo (Paraná) - Librarte (Paraná) - Mercado Libre a través de este link La Ciudad De Los Ciervos - Publicación ML - Amazon: La Ciudad De Los Ciervos - Amazon - Contacto directo con el autor (redes sociales) El libro es realizado para Argentina por Don Gato Gráfica de manera artesanal, en estilo japonés con costura expuesta, dándole no solo un acabado elegante y original, sino también la durabilidad y resistencia característica del arte nipón que no suelen encontrarse en los libros fabricados industrialmente. Fragmento del texto: >>Solo rumores se conocieron de lo que sucedió aquella tarde en la sala del trono, el viento soplaba húmedo y frío después de una tormenta de dos días que cayó nuevamente luego de que la voz de Agnus la ahuyentara. El sueño de las aves que poblaban las plazas seguía siendo robar la vida del lodo y llevarla a sus nidos, el olor de la lluvia lo impregnaba todo y las últimas hojas del otoño volaban erráticamente y morían en el suelo.<< Contacto Mail: [email protected]